
Hay decisiones que a la larga se pagan y es lo que le está pasando al Real Madrid. Pensar que se podía sobrevivir a la temporada más larga que se recuerda sin Carvajal y Militao quizás era demasiado optimista. Pensar que se podían ganar los tres títulos más importantes lanzando a los jugadores al campo como si fueran fichas, cambiando constantemente de posición a Valverde y Tchouaméni, también. Designar a Vinicius como el primer lanzador de penaltis también se está empezando a pagar. Y así, una larga lista de errores de la que el Bernabéu ya estaba avisando con sus toques de atención y de la que no se pueden librar los jugadores, que en muchos casos también han pensado que podían ganar LaLiga caminando.
Ante el Valencia, los blancos dijeron adiós al título de Liga salvo que al Barcelona le entre una pájara que es muy poco probable. Es una cuestión de hambre.
Vinicius no es el mejor lanzador de penaltis
Pensar que Vinicius es el mejor lanzador de penaltis de la plantilla, por delante de Mbappé, es engañarse así mismo. No hay nadie en el Real Madrid que lance los penaltis mejor que Kylian, por mucho que haya fallado dos esta temporada. Mbappé, recordemos, marcó tres goles de penalti al Dibu en la final de un Mundial. Experiencia como para tirar un penalti al Valencia en el Bernabéu tiene.
Debe dar un golpe de timón Carletto, dejarse de experimentos con Vinicius y nombrar a Mbappé primer lanzador por una sencilla razón: es el mejor. Y si falla, que falle. ¿Alguien discutía a Cristiano Ronaldo como lanzador en el Madrid? Pues falló 14.
Diakhaby se da una alegría
Hace poco más de un año, Diakhaby sufrió una gravísima lesión de rodilla que hizo temer incluso por su carrera. Se la produjo ante el Real Madrid en un choque con Tchouaméni, que le ha acompañado durante todo este tiempo en su recuperación. 330 días tardó en volver y en el Bernabéu se pegó el gustazo de ser protagonista marcando el gol con el que el Valencia abría el marcador.
Se marcó otro incomprensible en propia puerta, pero la posición de Mbappé en fuera de juego le echó un cable.
Fran González, dos goles en contra y una parada
Debutó Fran González y se convirtió en el quinto portero más joven en estrenarse con el Real Madrid. Y como todos sus predecesores, ni dejó la portería a cero ni consiguió la victoria. La realidad es que el canterano pasó de puntillas por el partido. Le metieron dos goles de cabeza, uno en un córner mal defendido por la defensa y otro en una contra. Solo hizo una parada, de mérito tras un rebote en el área. No fue el debut soñado.
Mamardashvili firma un partidazo
El portero georgiano hizo uno de sus partidos que no se olvidan. Lo paró casi todo, incluido el penalti a Vini, y dejó LaLiga en bandeja al Barcelona. Mamardashvili dejó nueve paradas en el Santiago Bernabéu, siendo héroe hasta el último minuto con un paradón a Rüdiger en el 96′.
Camavinga, ni de inicio ni como revolución
El Madrid ha perdido esta temporada a Camavinga, que apenas suma un par de partidos buenos. El francés fue clave la temporada pasada y el mejor agitador en cursos pasados, pero este año no funciona ni de inicio ni cuando sale desde el banquillo. Ante el Valencia no aportó nada cuando saltó al terreno de juego para buscar la remontada.
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