El ‘caso Errejón’ ha vuelto a la palestra mediática tras la difusión de unos audios de WhatsApp, a los que ha tenido acceso el medio El Confidencial, donde Elisa Mouliaá, denunciante por presunta agresión sexual, explicaba a una de las testigos que no podría declarar ciertas cosas, ya que de esta manera se pondría la causa en su contra. En concreto, las palabras fueron las siguientes: “Si empiezas a decir que me fui súper ‘happy’ a su casa, me van a meter por denuncia falsa”.
Además, seguidamente, le explicó qué es lo que podría testificar: “Que no te diste cuenta, que yo tampoco expresé mi malestar, que todos pensabais que era mi ligue (…) No hay que maquillar la realidad, tía. Hay que decir eso, pues que… no te diste cuenta”.
A esto, Soraya se mostró realmente atacada: “Me estás diciendo lo que tengo que decir, cómo tengo que hablar, me estás intentando chantajear diciendo que eres madre soltera… Cómo tienes tan poca vergüenza”, le espetó la organizadora de la fiesta.
Posteriormente, Mouliaá animó a su amiga a que no contase cosas que pudieran perjudicar a la causa, lo que dejó descolocada a Soraya: “Si se archiva, que se archive por falta de rotundidad ante lo que pide la Justicia, pero no por denuncia falsa porque falsa no es, tía (…) Lo único que te estoy pidiendo es que no cuentes cosas que puedan ir en mi contra. Y es tu palabra contra la mía, ¿sabes?”.
Elisa Mouliaá: “Este señor ha violado a más de seis mujeres que yo sepa”
“Si me citan, me ceñiré a los hechos que yo vi y viví, no a lo que otros piensan o dicen de Errejón. Esto no va de ver si el chaval es buena o mala persona, esto va de una denuncia de acoso sexual que tú has puesto”, contestó Soraya. Tras esto, hubo un intercambio de mensajes entre las dos mujeres, pero girando respecto a lo mismo.
Mouliáa
Sin embargo, un mes después de esta primera conversación, que ambas mantuvieron después de que estuviesen tres años sin contacto, Mouliaá volvió a la carga: “Solo te escribo para decirte que en esa fiesta, además de la coca que todos se pusieron, bebimos. Yo me bebí tres copas servidas por Errejón. Si no os acordáis. no es mi problema, este señor ha violado a más de seis mujeres que yo sepa porque me han llorado al teléfono, y yo tengo la obligación de contar lo que me hizo esa noche”.
Tras ello, Soraya zanjó la conversación volviendo a recordar que ella dará su testimonio de los hechos, “no mi opinión de lo que Íñigo Errejón ha hecho o dejado de hacer”.
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